El trabajo de Lihuel González explora las brechas invisibles que existen entre el lenguaje, la comunicación interpersonal y las historias personales y sociales que a menudo se pasan por alto. A través de la fotografía, el vídeo, la escultura y la performance, González propone una reinterpretación del mundo que nos rodea, resaltando los fragmentos descartados por la sociedad contemporánea. Sus proyectos revelan una poética de lo olvidado, donde los objetos y los espacios marginales se resignifican como portadores de historias y metáforas sobre nuestra interacción con el entorno.
El principio y el fin de las cosas es un archivo fotográfico que trata de encontrar, a través de la recolección y la observación de objetos, que están fuera de servicio, nuevas formas en lo que generalmente se considera un desperdicio.
A través de largos desplazamientos por la ciudad, recogía objetos, lo suficientemente pequeños como para llevarlos en mi bolso, y luego los fotografiaba en el estudio. Retratos de pequeños materiales que van desde restos industriales hasta utensilios domésticos y orgánicos.
Encuentra algo, recógelo y míralo de nuevo. En estos recorridos por la ciudad también recogí palabras, anécdotas y recuerdos que forman parte del archivo a través de epígrafes que acompañan a las imágenes.
Este proyecto cambia según la propuesta del expositor. Entendido como una serie de episodios, el primer capítulo realizado en Francia en 2023, donde presenta “El principio y el fin de las cosas: Una ciudad” en La Cité internationale des arts, basado en la observación e intervención de objetos encontrados en las calles de París, para luego trabajar de la misma manera en la ciudad de Buenos Aires cruzando imágenes fotográficas de la búsqueda parisina con objetos físicos, de mi ciudad, en la sala de exposiciones. Este segundo capítulo se tituló “Los Utilitarios” y tuvo lugar en la galería Gachi Prieto en marzo de 2024.