Cheminées sous marines

Apasionada por el dibujo y la pintura desde muy joven, Joëlle Darmon adoptó esta forma de arte en su adolescencia. Creativa, su placer por pintar y dibujar nunca la abandona. Artista autodidacta, perfeccionó sus técnicas con profesores de arte y pintores en la región de Toulouse donde vive.
Al comienzo de su carrera, en 1980, descubrió y experimentó con diversas técnicas y estilos, pintando numerosos temas inspirados en particular en la naturaleza.
Estudió pintura al óleo, acuarela, acrílico, carbón, pastel, y trabajó en diferentes soportes y expuso en el departamento de Haute-Garonne y en Provenza.
Después de estudios universitarios en idiomas y turismo, trabajó en el campo de la comunicación. Sus gustos se hicieron más refinados en los años 90 y más concretamente en 1992, tras el nacimiento de su hija que supuso una gran fuente de inspiración y motivación para ella. El artista decidió entonces favorecer la técnica acrílica. Produjo numerosas pinturas sobre los temas del mar, la flora, la infancia, la Provenza y África.
Siempre en busca de emociones a través de los colores que irrumpen en su lienzo, las mezcla con el material (arena, cuarzo, medios, geles…) para darles más vibraciones y relieve.
Imbuida de las obras de grandes maestros como Cézanne, Matisse, Chagall, e inspirada en sus viajes por la Provenza y en la cuenca mediterránea, ¡el color, la luz, la calidez y la serenidad brotan de sus lienzos!
Hoy, con la experiencia que ha adquirido en los últimos años, Joëlle Darmon ha dejado su trabajo en el campo del cuidado de niños para dedicarse por completo a la pintura.
Ahora pintora profesional, deja que su imaginación hable por sí misma recurriendo a la composición de pinturas medio abstractas, medio figurativas.
La naturaleza sigue siendo su principal fuente de inspiración y comienza su nueva vida artística honrando el color azul a través de las profundidades de los mares y océanos. Todavía utiliza técnicas mixtas y añade a los acrílicos texturas como morteros, pinturas reactivas, collages, tintas, resina, arcilla y pan de oro.
Estos últimos le dan al trabajo ese toque de luz y emoción que invita a viajar y que es su firma.